martes, 30 de junio de 2009

Faltan 23 rolas para mi cumpleaños...

ROLA NÚMERO DOS:
COME AS YOU ARE - NIRVANA
EL YO QUE CRECIÓ EN LOS NOVENTAS.

Come as you are, as you were
As I want you to be
As a friend, as a friend, as an old enemy
Take your time, hurry up
The choice is your, don't be late
Take a rest, as a friend, as an old memoria
memoria
memoria
memoria

Come dowsed in mud, soaked in bleach
As I want you to be
As a trend, as a friend, as an old memoria.
Memoria
Memoria
Memoria

And I swear that I don't have a gun
No I don't have a gun
No I don't have a gun
Memoria
Memoria
Memoria, I don't have a gun

And I swear that I don't have a gun
No I don't have a gun
No I don't have a gun
No I don't have a gun

Memoria
Memoria




lunes, 29 de junio de 2009

Faltan 24 rolas para mi cumpleaños…

ROLA NÚMERO UNO:
CEREMONY - NEW ORDER
EL YO INOLVIDABLE Y ÚNICO.

This is why events unnerve me,
They find it all, a different story,
Notice whom for wheels are turning,
Turn again and turn towards this time,
All she asks the strength to hold me,
Then again the same old story,
World will travel, oh so quickly,
Travel first and lean towards this time.

Oh, Ill break them down, no mercy shown,
Heaven knows, its got to be this time,
Watching her, these things she said,
The times she cried,
Too frail to wake this time.

Oh Ill break them down, no mercy shown
Heaven knows, its got to be this time,
Avenues all lined with trees,
Picture me and then you start watching,
Watching forever, forever,
Watching love grow, forever,
Letting me know, forever.






VEINTICINCO, UNA CRÓNICA DEDICADA A MIS CAMARADAS.

VEINTICINCO, UNA CRÓNICA DEDICADA A MIS CAMARADAS.

Estoy exactamente a veinticinco días de cumplir veinticinco años, y algo curioso me ocurre siempre que se acerca esta fecha, me pongo reflexivo y más nostálgico de lo normal, incluso hasta sensible, sin embargo, la transición de un año a otro se ha vuelto un momento adecuado para poder meditar sobre los cambios en mi vida, sobre el transcurso del tiempo, el desvanecimiento de la juventud, o los logros obtenidos y las perdidas padecidas a lo largo de trescientos sesenta y cinco días; otra cosa que me ocurre es que comienzo a recordar con más intensidad momentos pasados, que por una u otra razón habían quedado momentáneamente ocultos en mi memoria, pero que sin pensarlo, vuelven trayendo un significado diferente; uno de esos recuerdos que en estas fechas ha vuelto se remonta a mi etapa en la preparatoria, cuando no era más que un freak sin las preocupaciones y las responsabilidades del mundo adulto.

Si mal no recuerdo, ocurrió más o menos para un mes de junio, en un verano de noches más frescas que las de éste; algunos de mis amigos y yo habíamos asistido a la presentación de un libro sobre al historia del rock en el Museo Regional de la Laguna, la cual se había extendido muchísimo mas de lo esperado, pues el autor se había emocionado tanto hablando sobre su obra, que estupidamente, durante más de dos horas, nos había relatado el contenido del libro, en lugar de sólo mostrarnos un panorama que nos incitara a adquirirlo y leerlo por nuestra cuenta, haciendo inútil la adquisición de una obra de la que de antemano ya sabíamos que esperar.

Tras abandonar el auditorio donde había tenido lugar aquella presentación, mis amigos y yo nos quedamos platicando a las afueras del museo, esperando a que nuestros respetivos padres llegaran por nosotros, tiempo necesario para que Abraham y yo comenzáramos a platicar nuevamente de nuestro tópico favorito: la música.

Primero, hablábamos sobre el libro y su autor, el cual para los dos era obvio que tenía una amplia experiencia y muchos conocimientos relacionados con el tema, y que para él, al igual que para nosotros, la música era algo de suma relevancia en su vida. Después, hablamos de varias canciones, de la relevancia y los distintos significados que algunas de ellas tenían para cada uno de nosotros, de cómo, hasta aquel momento, estábamos construyendo el soundtrack de nuestras vidas, de lo curioso que nos resultaba cómo una sola canción nos evocaba un sinfín de recuerdos: colores, sonidos, aromas, sensaciones, etc.

A pesar de que para aquella fecha tenía muy poco tiempo de conocer a Abraham, le dije que siempre lo recordaría con una rola, en este caso, Daysleeper de R.E.M., y que asimismo, aquellos que consideraba mis amigos de verdad, siempre tendrían una rola que al escucharla me haría evocarlos, una canción que me haría recordar sus risas o sus lagrimas, el timbre de sus voces, las miradas severas que atinadamente me prorrumpieron cuando dije algo fuera de lugar, la calidez de los abrazos de consuelo o felicitación, las carcajadas que les provocaron mis estupideces, la manera en que se movieron sus manos y arquearon sus cejas cuando juntos nos pusimos a criticar a alguien, las frases que alguna vez dijeron, y que sin quererlo, entraron en mi mente y decidieron hacer de ella su hogar, las aventuras que vivimos juntos, las cosas que descubrimos, los momentos difíciles y los momentos agradables compartidos, los días grises y los detestables días de sol que nos tocaron vivir.

Recuerdo que Abraham me sonrió y me dijo que era padre saber que siempre lo recodaría una canción tan bella para él como Daysleeper, después, tocó afectuosamente mi hombro y juntos nos incorporamos a la plática que en aquel momento entablaban los demás.

He decidido compartir con ustedes este recuerdo por una razón muy simple, quiero que sirva de preámbulo para una cuestión en verdad sencilla pero significativa para mí –les digo que estos días me pongo cursi y sensible, así que aprovechen porque no todos los días estoy tan afectuoso–, quiero darles a todos las gracias por brindarme su amistad y apoyo a lo largo de todo el tiempo que tenemos de conocernos; les doy las gracias por aguantar mis momentos de ira irrazonable, de obcecada neurosis, de hiriente indiferencia y nula comprensión hacías sus sentimientos o manera pensar, y por los mismos motivos les pido perdón si les he hecho daño, perdón si los he puesto en vergüenza, si he sido severo con mis comentarios, si los he defraudado y les he fallado, pero lo cierto es que no soy perfecto y así como yo he incurrido en errores –algunos quizás imperdonables– muchos de ustedes también tienen una larga cola que yo les puedo pisar –que feo suena eso– por decirlo de alguna manera. Podría decirles que intentaré ser un mejor amigo, pero la verdad es que no me considero capaz de cambiar, a mis casi veinticinco años tengo una personalidad ya construida y muy definida, si bien mi conducta es susceptible a cambios, no así mi manera de pensar, por lo que no me queda de otra más que pedirles que me toleren tal cual soy, que me sigan brindado el placer de su compañía y lujo de su amistad; quizás el resto del año me muestre como siempre soy, un freak mal agradecido, neurótico, con ataques de nervios y risa, susceptible de temerle a sus actos y a sus palabras pero incapaz de arrepentirse de ellas, pero a cambio, prometo aguantarlos, quererlos y comprenderlos de la misma manera en que ustedes lo hacen conmigo.

En fin, ya para concluir tanta cursilería, quiero compartirles una lista con las rolas que me hacen recordarlos, quizás, para muchos esa rola no les diga nada, no represente algo o de plano no entiendan el por qué se relaciona con ustedes, pero en verdad les digo que todas ellas evocan un momento especifico en nuestra historia en común; asimismo, a partir de hoy y hasta el próximo 23 de junio, publicaré en mi blog, en el Twitter y en el Facebook, veinticinco de mis rolas favoritas, veinticinco rolas que de una u otra forma hablan de mí, rolas con las que me gustaría que me recuerden cuando lleguen a escucharlas; el último día publicare la que es mi canción favorita, quizás muchos ya sepan cuál, y probablemente sea esa rola con la que me recuerden.

Hago esto no con el afán de recordarles mi fecha de cumpleaños, sino a manera de hacer una celebración pequeña y personal por mi vigésimo quinto onomástico –si yo mismo no me rindo tributo nadie lo va a hacer–, y porque muchos de los que me conocen saben que no soy de las personas que acostumbra hacer una fiesta para celebrar su cumpleaños, mucho menos el mero 23, día en que de plano prefiero encláustrame en mi habitación, recibir felizmente sus llamadas o correos desde la oscuridad de mi alcoba y olvidarme por completo que soy un año más viejo (un cuarto de siglo más viejo, que horror).

LAS CANCIONES.
Con casi todos aun mantengo una amistad cercana, con otros no tanto como quisiera, y unos cuantos más, puede decirse que lamentablemente hay una distancia que nos separa, pero como dijo mi amiga Diana en su blog: “muchas de las veces, gente entra y sale de nuestras vidas sin alguna explicación aparente, pero es su participación lo que hace que se les recuerde a pesar de las distancias…”, estas son las rolas con las que creo siempre los recordare:

Abraham – Daysleeper, R.E.M.

Mayra – The Unforgiven, METALLICA.

JJ – Creep, RADIOHEAD.

Miriam – One, U2.
Ricardo – The Remedy (I Won’t Worry), JASON MRAZ.
Daniela – Champagne Supernova, OASIS.
Dante – Mmm Mmm Mmm, CRASH TEST DUMMIES.
Efrén – Smells Like Teen Spirit, NIRVANA.
Carlos Santiesteban – Welcome to the jungle, GUNS N' ROSES.
Jaime (Amiguis) – Dead, ZOÉ.
Lorena – What´s Up, 4 NON BLONDES.
Urick – Abre los Ojos, ZURDOK (Parece raro, pero hay una razón lógica).
Yvani – Plainsong, THE CURE.
Carlos (Carlis para Mayra) – Nothing Else Matters, METALLICA.
Marcelo – Lithium, NIRVANA.
Luz – Yellow, COLDPLAY.
Liz – Moscas en la Casa, SHAKIRA.
Brenda – Crazy, Alanis Morissette.
Juan Carlos – Other Side, RED HOT CHILLI PEPPERS.
Diana – November Rain, SOUNDTRACK DE RANMA ½
Karla – Salvation, THE CRANBERRIES.
Laura – Olvidar, PAUL DESMOND.
Homero – Pues cualquiera del Black Album de METALLICA que se que es tu favorito, jajaja, no se crea, With A Little Help From My Friends, THE BEATLES.
Julia – I knew I loved you, SAVAGE GARDEN (Cabe aclarar que no es mi estilo, pero te recuerdo con esta rola porque se que te gusta, o al menos en la prepa solía gustarte, de ahí que cuando la escucho te recuerdo).
Hugo – 1979, SMASHING PUMPKINS (Pues quizás no lo creas, pero sí; se que ya no nos hablamos como antes, en gran medida por mi culpa, hemos tenido nuestras diferencias, pero pues nos han pasado nuestras cosas, tú sabes, sin embargo, con toda sinceridad te digo que ha sido un honor haberte conocido, y que los cinco años de la universidad fuiste un buen amigo y un compañero de equipo inigualable, en verdad fue un placer ser socio del tipo más inteligente del salón, esos cinco años estudio no habrían sido lo mismo sin usted, espero no se asuste, hasta yo me sentí más raro de lo normal, nos vemos).

…y las que faltan, pero es tarde y tengo sueño.

Se valen dudas y aclaraciones de tan rara lista.

P.D. Deseo que este año se agreguen más nombres, sería un buen regalo de cumple.

miércoles, 24 de junio de 2009

BAZ LUHRMANN TIENE UN «JE NE SAIS QUOI»

BAZ LUHRMANN TIENE UN «JE NE SAIS QUOI»
El domingo me moría del aburrimiento, así que decidí darme una vuelta en el centro comercial para ver los nuevos dvd’s en Mixup, haciendo una previa parada en la Ghandi para encargar un libro; tras un rato viendo los anaqueles en la citada tienda de discos, finalmente compré, por la módica cantidad de noventa y nueve pesos, “A merced del odio”, un pelicula protagonizada por mi adorada Bette Davis; aún era temprano y falta bastante tiempo para que en mi casa la comida estuviera lista, así que decidí entrar al Sanborns que queda justo frete al Mixup, para perder el tiempo dando una ojeada a las revistas.

Al llegar a la sección de moda, hubo una publicación que llamó enormemente mi atención, era la Vanity Fair del mes de abril -que obviamente no había sido vendida- y que en su portada mostraba a una sensual Penélope Cruz tendida a los pies de su mentor, el fantástico Pedro Almodovar; como fiel fanático del director Manchego me apure a comprar la revista en comento, sin prestar atención al resto del material de tiraje más reciente.

Al llegar a mi casa comencé a leer las entrevistas realizadas a Pedro, Penélope y parte del reparto del elenco de “Los Abrazos Rotos”, la mas reciente película de Almodovar; al terminar de leer esto, empecé a pasar las paginas de la Vanity, hasta que la fotografía de la página 135 cautivo por completo mi curiosidad: tomada por Annie Leibovitz, la imagen en cuestión muestra a Nicole Kidman vestida con un bellísimo abrigo negro del diseñador italiano Giambattista Valliy, en ella luce imponente y fría como el mármol, y magnánima cual reina que es; junto a ella está una figura, que al menos para mi, resultaba todavía más cautivadora, el director australiano Baz Luhrmann, con una camisa y una corbata de Ermenegildo Zegna y un elegantísimo traje de Dior Homme (…porque Dior nos hace, y Dior nos viste), acariciado levemente con su mano el rostro de la rubia, mientras admira el porte de su musa.

De figura delgada, con el semblante de un atractivo hombre maduro, de cabellos plateados, con la blanquísima tonalidad de su piel, y una mirada severa, crítica y aún más gélida que la de Kidman, Luhrmann tiene "un yo no sé qué", que me hipnotizó de una manera sumamente placentera. En aquel instante, pedí un deseo olvidándome de todo lo demás que he podido anhelar en mí vida: llegar a la edad que tiene Baz Luhrmann (46 años) y verme aunque sea una décima parte de lo bien que luce ese elegante hombre australiano.

EL FREAK Y LA JUSTICIA

EL FREAK Y LA JUSTICIA
Son las dos y media de la mañana, del sábado seis de junio de dos mil nueve; estoy en mi habitación, resguardado por las sombras protectoras de la noche que me acompañan, hace años que dejé de tenerles miedo, pues descubrí que hay cosas peores a las que en verdad debo temerles, como a las consecuencias de mis actos, actos espontáneos, no planeados, no medidos; actos que después de consumados me causan más pavor que aquello que me es desconocido.

Se supone que en este momento debería estar saliendo de una fiesta, o quizá, dependiendo de las circunstancias, disfrutando aún de ella, pero no es así, como ya lo dije, estoy sólo en mi habitación frente a mi computadora, escribiendo una crónica con la que pretendo desahogarme, sacar este extraño sentimiento que llevo dentro, una rara mezcla de frustración, tristeza, nostalgia y confusión; una crónica que quizá no tenga ni pies ni cabeza, en realidad no sé como vaya a terminar, simplemente he comenzado ha escribir, mis manos transcriben lo que mi cabeza va hilando segundo a segundo, por lo cual, este relato no tiene aparentemente un tema en especifico, sin embargo, hay algo que quiero contar, que necesito sacar de mi mente para que no se pierda entre la propia indiferencia y la necesidad de olvido.

Hace ya muchas semanas que no actualizo mi blog con regularidad, la razón es la falta de tiempo, de animo e inspiración, he estado agobiado, agotado mentalmente, la verdad es que he invertido mucho de mi tiempo y mis energías en mi trabajo en el tribuna, así que cuando obtengo algo de tiempo libre, la verdad es que lo desperdicio tratando de olvidar todo, en especial de escribir; sin ánimos de exageración, más que nunca me he sentido como Andrea Sachs en “El Diablo Viste de Prada”, y aunque parezca extraña la comparación entre un personaje femenino y mi persona, lo cierto es que me siento como ella; en otras ocasiones ya he expresado que muchas veces me he visto reflejado en su historia, claro es, dejando de lado los diseños exclusivos de Chanel y Valentino (bueno, mi nueva jefa es fanática de la joyería de Bulgari y la ropa de Banna Republic, algo es algo), pero a fin de cuentas, igual de frustrado y cansado, es por eso que aunque muchos puedan considerar la novela y la película como superficiales, lo cierto es que para mi tienen un significado muy especial.

Me siento como Andrea porque al igual que ella tengo un titulo que avala mis estudios, porque como ella soy una persona inteligente y trabajadora, que hace su labor de la mejor manera, que siempre está dispuesta a aprender y aportar algo para hacer mejor las cosas, y que pesar de esta dedicación, no logra sentirse plenamente recompensada o valorada por su esfuerzo; además, mi jefa, al igual que la de Andrea, me agobia con absurdas tareas que nada tienen que ver con mis obligaciones contractuales, y no en balde quiere que haga a la perfección y con prontitud todas aquellas que sí me son propias; para mi fortuna, mi jefa es educada, agradable, simpática y cariñosa, no ese mar de estrés y amargura que es Miranda, la jefa de Andrea.

Verán, mi trabajo no es nada del otro mundo pero si es algo pesado, llevo trabajando en él ya casi cuatro años, comencé cuando aún estaba en la universidad; desde pequeño siempre he soñado con convertirme en Juez algún día, solía jugar a eso; junto con mis hermanos y primos simulaba constituirme como una figura de autoridad y poder, pero imparcial, con el conocimiento y el sentido común necesario para tomar una decisión adecuada y dictar un veredicto, claro que de niño no hacia un análisis tan profundo, pero ese sentimiento era el mismo: resolver un conflicto entre dos parte basándome sólo en los hechos y no en los sentimientos.

Por azares del destino, por obra divina, porque así estaba escrito, o simplemente, porque así tenía que ser, hace cuatro años tuve la oportunidad de ingresar al Poder Judicial de la Federación, jajajaja, un “trabajo por el que miles de abogados en México morirían” (esa frase me recuerda algo, dónde la he escuchado), ¿Por qué? Porque es un trabajo bien remunerado, que permite alcanzar un futuro seguro y cómodo; porque otorga un nivel y un estatus difícil de conseguir de manera rápida (aunque no sencilla, en verdad es mucho trabajo), y más aún, difícil de mantener; vaya, porque es uno de los caminos para llegar a la cúspide (una magistratura, el Consejo de la Judicatura, la Suprema Corte), al nivel jerárquicamente más alto de la legalidad en México; sin embargo, esa legalidad no es justa o perfecta, y en honor a la verdad, pertenecer al Poder Judicial Federal tampoco es muy divertido o alentador, ni constituye la única clave suprema del éxito financiero y personal, pues fuera de él también hay abogados que obtienen grandes ganancias económicas, y sobretodo, mayores en el ámbito personal y espiritual.

El trabajo en el Poder Judicial Federal (no confundirse con el fuero común o Juzgados Locales) es muy, muy pesado, ingresar a él no es fácil, y mantenerse ahí mucho menos; el sistema judicial en México es asqueroso, como lo dijo una amiga, pero no es asqueroso por sí mismo, son las personas que participan de la corrupción, ya sean ciudadanos o funcionarios, las que lo hacen así. Entonces, ¿Por qué sigo trabajando ahí? Pues son muchas las razones, primero, porque adoro el estatus y posición que me brinda, y el nivel que todavía le falta darme; porque recibo un sueldo que no está mal; porque me gusta mi trabajo, porque sé muy bien que mi labor, aunque probablemente mínima, es importante, e insisto, porque a pesar de todo, me gusta mi trabajo; porque sin importar lo que he visto, aún sigo creyendo que la justicia no sólo es un ideal inalcanzable o intangible, es algo real, algo que es viable si toda la sociedad pone algo de su parte; además, frente a mí tengo el esfuerzo, el sacrificio y la dedicación de cientos de personas que trabajan día a día (en ocasiones sin dormir, pues las jornadas laborales son criminales) para el Poder Judicial Federal, que hacen su trabajo con orgullo, honestidad, dedicación y mucho amor; todo esto me anima a continuar, a no darme por vencido, a creer que no todo está podrido, aunque lamentablemente la gente de afuera está tan cansada de la corrupción (y cómo no culparla) que es incapaz de apreciar y aceptar esa verdad; y finalmente, porque durante estos cuatro años me he partido el lomo, porque me he ganado a base muchos dolores de cabeza, esfuerzo y dedicación, todos mis nombramientos y mis designaciones, porque después de todo este tiempo no voy a tirar la toalla y minimizar mi sacrificio y mi esfuerzo, porque ha valido la pena y he disfrutado trabajar ahí, porque no me da la chingada gana rendirme, porque el día que decida salir del Poder Judicial Federal, será porque he logrado mi meta o porque de plano, han aniquilado mi fe por la endeble pero aún existente justicia mexicana.





miércoles, 17 de junio de 2009

QUE DA MEDIO PARA AMAR SIN MUCHA PENA

QUE DA MEDIO PARA
AMAR SIN MUCHA PENA
Sor Juana Inés de la Cruz


Yo no puedo tenerte ni dejarte,
ni sé por qué, al dejarte o al tenerte,
se encuentra un no sé qué para quererte
y muchos sí sé qué para olvidarte.

Pues ni quieres dejarme ni enmendarte,
yo templaré mi corazón de suerte
que la mitad se incline a aborrecerte
aunque la otra mitad se incline a amarte.

Si ello es fuerza querernos, haya modo,
que es morir el estar siempre riñendo:
no se hable más en celo y en sospecha,

y quien da la mitad, no quiera el todo;
y cuando me la estás allá haciendo,
sabe que estoy haciendo la deshecha.

lunes, 15 de junio de 2009

JULIAN PLENTI, EL LADO DESCONOCIDO DE PAUL BANKS

JULIAN PLENTI, EL LADO DESCONOCIDO DE PAUL BANKS

No sé ustedes, pero en lo personal me gusta más Paul Banks que Julian Plenti, vaya, obviamente son el mismo sujeto, pero entre “Plenti” y “Banks” existen significativas diferencias que hacen parecer que son dos individuos completamente distintos, y quizás así lo es; los fanáticos de Interpol estamos acostumbrados a ver a Paul Banks como un sujeto elegante y misterioso, un tipo con una sonrisa irónica y una mirada cínica, su voz, hipnótica casi siempre, tanto puede ser la de un tipo lleno dolor y tristeza, como la voz de un tipo fuerte y consumido por la ira; en contraposición, Plenti parece bohemio y taciturno, su voz, lógicamente, posee los mismos matices que la de Banks, pero aún así no suena igual, probablemente me suena diferente porque no se encuentra acompañada por los delicados acordes de la guitarra Daniel, la sonoridad del bajo de Carlos y la inigualable sofisticación de la batería de Fogarino; pero dejando de lado los perjuicios y el lazo que inevitablemente une a Julian Plenti con Interpol, el trabajo de Plenti es bueno, su música es interesante y sofisticada, por supuesto, con una irrevocable similitud e influencia, sobretodo, por el último material discográfico de la banda que liderea Banks, el “Our Love To Admire”; sin embargo, el “Skyscraper”, nombre de este primer trabajo, se encuentra revestido de su propia esencia e intención, que es algo más calmada y relajada que el rock obscuro e insolente de Interpol.

Aquí les dejo el primer sencillo del Skyscraper, Fun That We Have, de Julian Plenti, que pesar de que no es “Paul Banks”, aun así me encanto.



P.D. Gracias a Mario G. por los links, en verdad los disfrute.





domingo, 14 de junio de 2009

ESPERANDO “THE BEATLES ROCK BAND”

ESPERANDO “THE BEATLES ROCK BAND”

No me lo van a creer, pero me muero de ganas por jugar THE BEATLES ROCK BAND, que habrá de salir a la venta el próximo nueve de septiembre, y mis ganas han aumentado todavía más después de ver este maravilloso trailer elaborado por los mismos animadores que desarrollaron los personajes de Gorillaz; es una verdadera obra de arte que captura la esencia del legendario cuarteto de Liverpool, espero que les guste tanto como a mí:




P.D. Hay que ahorrar, porque de seguro no será muy barato, sin embargo, creo que el gasto valdrá la pena.

DOS AÑOS

DOS AÑOS
Hoy estas crónicas cumplen ya dos años, veinticuatro largos meses que vistos en retrospectiva parecen haberse esfumado en un abrir y cerrar de ojos; muchas cosas han pasado en mi vida en este tiempo, cosas buenas y cosas malas, he conocido mucha gente, he visto un par de cosas interesantes, he realizado unos cuantos viajes, he soltado una que otra lagrimita y sobretodo muchas carcajadas.

Estos últimos meses no he actualizado mis crónicas como hubiera querido, pero lo cierto es que no soy el mismo Blogger que comenzó hace dos años a escribir en este espacio, ahora tengo más responsabilidades laborales y menos tiempo libre, sin embargo, mantengo la misma intención de plasmar en mi blog todo aquello que de pronto despierte mi atención, me resulte interesante o simplemente necesite contar, ¿Para qué? Para preservar para mi propia persona un testimonio de todo lo que me ocurre y, principalmente, lo que pasa a mí alrededor.

Ahora bien, quiero agradecer a todos aquellos, conocidos o desconocidos, lectores habituales o esporádicos, que han dedicado algo de su valiosísimos tiempo a dar lectura a mis crónicas, asimismo, como ya lo hice una vez, quiero ofrecerles una disculpa por todos los errores ortográficos y gramaticales que puedan encontrarse en ellas; sé muy bien que no hay excusa alguna para muchas de ellas, pero en mi defensa, lo único que puedo alegar es que muchas veces me veo limitado de tiempo para corregirlas o termino de escribirlas muy noche, cuando después de un largo día corrigiendo mi trabajo en el tribunal, mi cerebro ya no funciona con la misma energía que en la mañana o al medio día.

Finalmente, quiero cerrar este post con el video de una canción que, junto con Bluebells, que es la rola del mes, he escuchado mucho últimamente, una rola elegante y bella, justo el toque que deseaba darle a este post en una fecha como ésta:




LA ROLA DEL MES

ROLA NÚMERO VEINTICINCO - JUNIO
Bluebells
Patrick Wolf
_____________________

Lucy, remember
The smell of that fall
The fires of fungus
And the rotting leaves

I fell off the wagon
Into your arms
Into this long month of Sundays

And you were my husband
My wife, my heroin
Now this is our final December

Now deep in a forest
Losing all though of spring
And nothing can help me remember
And I'm going nowhere fast
A darker day has holed at last
Deep in a dream I set the calmness to spinning

And your love has come too late
Away from the garden gate
Wake me up when the blue bells are ringing

Now that it's over after all that we had
A river runs through the rafters down, down, down
Does it leave me sleeping? Dreaming only of spring
The phone rings out and I remember
But I'm going nowhere fast
A darker day has holed at last
Deep in this dream I set the calmness to spinning

And your love has come too late
Now wave to the garden gate
Wake me up when the blue bells are ringing
Ringing, ringing, ringing
Wanna hear them ringing, my love
Wanna hear them ringing
Ringing...