lunes, 29 de junio de 2009

VEINTICINCO, UNA CRÓNICA DEDICADA A MIS CAMARADAS.

VEINTICINCO, UNA CRÓNICA DEDICADA A MIS CAMARADAS.

Estoy exactamente a veinticinco días de cumplir veinticinco años, y algo curioso me ocurre siempre que se acerca esta fecha, me pongo reflexivo y más nostálgico de lo normal, incluso hasta sensible, sin embargo, la transición de un año a otro se ha vuelto un momento adecuado para poder meditar sobre los cambios en mi vida, sobre el transcurso del tiempo, el desvanecimiento de la juventud, o los logros obtenidos y las perdidas padecidas a lo largo de trescientos sesenta y cinco días; otra cosa que me ocurre es que comienzo a recordar con más intensidad momentos pasados, que por una u otra razón habían quedado momentáneamente ocultos en mi memoria, pero que sin pensarlo, vuelven trayendo un significado diferente; uno de esos recuerdos que en estas fechas ha vuelto se remonta a mi etapa en la preparatoria, cuando no era más que un freak sin las preocupaciones y las responsabilidades del mundo adulto.

Si mal no recuerdo, ocurrió más o menos para un mes de junio, en un verano de noches más frescas que las de éste; algunos de mis amigos y yo habíamos asistido a la presentación de un libro sobre al historia del rock en el Museo Regional de la Laguna, la cual se había extendido muchísimo mas de lo esperado, pues el autor se había emocionado tanto hablando sobre su obra, que estupidamente, durante más de dos horas, nos había relatado el contenido del libro, en lugar de sólo mostrarnos un panorama que nos incitara a adquirirlo y leerlo por nuestra cuenta, haciendo inútil la adquisición de una obra de la que de antemano ya sabíamos que esperar.

Tras abandonar el auditorio donde había tenido lugar aquella presentación, mis amigos y yo nos quedamos platicando a las afueras del museo, esperando a que nuestros respetivos padres llegaran por nosotros, tiempo necesario para que Abraham y yo comenzáramos a platicar nuevamente de nuestro tópico favorito: la música.

Primero, hablábamos sobre el libro y su autor, el cual para los dos era obvio que tenía una amplia experiencia y muchos conocimientos relacionados con el tema, y que para él, al igual que para nosotros, la música era algo de suma relevancia en su vida. Después, hablamos de varias canciones, de la relevancia y los distintos significados que algunas de ellas tenían para cada uno de nosotros, de cómo, hasta aquel momento, estábamos construyendo el soundtrack de nuestras vidas, de lo curioso que nos resultaba cómo una sola canción nos evocaba un sinfín de recuerdos: colores, sonidos, aromas, sensaciones, etc.

A pesar de que para aquella fecha tenía muy poco tiempo de conocer a Abraham, le dije que siempre lo recordaría con una rola, en este caso, Daysleeper de R.E.M., y que asimismo, aquellos que consideraba mis amigos de verdad, siempre tendrían una rola que al escucharla me haría evocarlos, una canción que me haría recordar sus risas o sus lagrimas, el timbre de sus voces, las miradas severas que atinadamente me prorrumpieron cuando dije algo fuera de lugar, la calidez de los abrazos de consuelo o felicitación, las carcajadas que les provocaron mis estupideces, la manera en que se movieron sus manos y arquearon sus cejas cuando juntos nos pusimos a criticar a alguien, las frases que alguna vez dijeron, y que sin quererlo, entraron en mi mente y decidieron hacer de ella su hogar, las aventuras que vivimos juntos, las cosas que descubrimos, los momentos difíciles y los momentos agradables compartidos, los días grises y los detestables días de sol que nos tocaron vivir.

Recuerdo que Abraham me sonrió y me dijo que era padre saber que siempre lo recodaría una canción tan bella para él como Daysleeper, después, tocó afectuosamente mi hombro y juntos nos incorporamos a la plática que en aquel momento entablaban los demás.

He decidido compartir con ustedes este recuerdo por una razón muy simple, quiero que sirva de preámbulo para una cuestión en verdad sencilla pero significativa para mí –les digo que estos días me pongo cursi y sensible, así que aprovechen porque no todos los días estoy tan afectuoso–, quiero darles a todos las gracias por brindarme su amistad y apoyo a lo largo de todo el tiempo que tenemos de conocernos; les doy las gracias por aguantar mis momentos de ira irrazonable, de obcecada neurosis, de hiriente indiferencia y nula comprensión hacías sus sentimientos o manera pensar, y por los mismos motivos les pido perdón si les he hecho daño, perdón si los he puesto en vergüenza, si he sido severo con mis comentarios, si los he defraudado y les he fallado, pero lo cierto es que no soy perfecto y así como yo he incurrido en errores –algunos quizás imperdonables– muchos de ustedes también tienen una larga cola que yo les puedo pisar –que feo suena eso– por decirlo de alguna manera. Podría decirles que intentaré ser un mejor amigo, pero la verdad es que no me considero capaz de cambiar, a mis casi veinticinco años tengo una personalidad ya construida y muy definida, si bien mi conducta es susceptible a cambios, no así mi manera de pensar, por lo que no me queda de otra más que pedirles que me toleren tal cual soy, que me sigan brindado el placer de su compañía y lujo de su amistad; quizás el resto del año me muestre como siempre soy, un freak mal agradecido, neurótico, con ataques de nervios y risa, susceptible de temerle a sus actos y a sus palabras pero incapaz de arrepentirse de ellas, pero a cambio, prometo aguantarlos, quererlos y comprenderlos de la misma manera en que ustedes lo hacen conmigo.

En fin, ya para concluir tanta cursilería, quiero compartirles una lista con las rolas que me hacen recordarlos, quizás, para muchos esa rola no les diga nada, no represente algo o de plano no entiendan el por qué se relaciona con ustedes, pero en verdad les digo que todas ellas evocan un momento especifico en nuestra historia en común; asimismo, a partir de hoy y hasta el próximo 23 de junio, publicaré en mi blog, en el Twitter y en el Facebook, veinticinco de mis rolas favoritas, veinticinco rolas que de una u otra forma hablan de mí, rolas con las que me gustaría que me recuerden cuando lleguen a escucharlas; el último día publicare la que es mi canción favorita, quizás muchos ya sepan cuál, y probablemente sea esa rola con la que me recuerden.

Hago esto no con el afán de recordarles mi fecha de cumpleaños, sino a manera de hacer una celebración pequeña y personal por mi vigésimo quinto onomástico –si yo mismo no me rindo tributo nadie lo va a hacer–, y porque muchos de los que me conocen saben que no soy de las personas que acostumbra hacer una fiesta para celebrar su cumpleaños, mucho menos el mero 23, día en que de plano prefiero encláustrame en mi habitación, recibir felizmente sus llamadas o correos desde la oscuridad de mi alcoba y olvidarme por completo que soy un año más viejo (un cuarto de siglo más viejo, que horror).

LAS CANCIONES.
Con casi todos aun mantengo una amistad cercana, con otros no tanto como quisiera, y unos cuantos más, puede decirse que lamentablemente hay una distancia que nos separa, pero como dijo mi amiga Diana en su blog: “muchas de las veces, gente entra y sale de nuestras vidas sin alguna explicación aparente, pero es su participación lo que hace que se les recuerde a pesar de las distancias…”, estas son las rolas con las que creo siempre los recordare:

Abraham – Daysleeper, R.E.M.

Mayra – The Unforgiven, METALLICA.

JJ – Creep, RADIOHEAD.

Miriam – One, U2.
Ricardo – The Remedy (I Won’t Worry), JASON MRAZ.
Daniela – Champagne Supernova, OASIS.
Dante – Mmm Mmm Mmm, CRASH TEST DUMMIES.
Efrén – Smells Like Teen Spirit, NIRVANA.
Carlos Santiesteban – Welcome to the jungle, GUNS N' ROSES.
Jaime (Amiguis) – Dead, ZOÉ.
Lorena – What´s Up, 4 NON BLONDES.
Urick – Abre los Ojos, ZURDOK (Parece raro, pero hay una razón lógica).
Yvani – Plainsong, THE CURE.
Carlos (Carlis para Mayra) – Nothing Else Matters, METALLICA.
Marcelo – Lithium, NIRVANA.
Luz – Yellow, COLDPLAY.
Liz – Moscas en la Casa, SHAKIRA.
Brenda – Crazy, Alanis Morissette.
Juan Carlos – Other Side, RED HOT CHILLI PEPPERS.
Diana – November Rain, SOUNDTRACK DE RANMA ½
Karla – Salvation, THE CRANBERRIES.
Laura – Olvidar, PAUL DESMOND.
Homero – Pues cualquiera del Black Album de METALLICA que se que es tu favorito, jajaja, no se crea, With A Little Help From My Friends, THE BEATLES.
Julia – I knew I loved you, SAVAGE GARDEN (Cabe aclarar que no es mi estilo, pero te recuerdo con esta rola porque se que te gusta, o al menos en la prepa solía gustarte, de ahí que cuando la escucho te recuerdo).
Hugo – 1979, SMASHING PUMPKINS (Pues quizás no lo creas, pero sí; se que ya no nos hablamos como antes, en gran medida por mi culpa, hemos tenido nuestras diferencias, pero pues nos han pasado nuestras cosas, tú sabes, sin embargo, con toda sinceridad te digo que ha sido un honor haberte conocido, y que los cinco años de la universidad fuiste un buen amigo y un compañero de equipo inigualable, en verdad fue un placer ser socio del tipo más inteligente del salón, esos cinco años estudio no habrían sido lo mismo sin usted, espero no se asuste, hasta yo me sentí más raro de lo normal, nos vemos).

…y las que faltan, pero es tarde y tengo sueño.

Se valen dudas y aclaraciones de tan rara lista.

P.D. Deseo que este año se agreguen más nombres, sería un buen regalo de cumple.

2 comentarios:

Diana dijo...

cumplir un cuarto de siglo se dice fácil, pero vaya que requiere de un gran esfuerzo no sólo por el hecho de llegar, es también ya parte del ser adulto o maduro (llámalo como prefieras, alfin y al cabo no siempre van de la mano)reflexionar sobre le pasado, sobre tus acciones y ver qué te falta por hacer; he estado al pendiente delas canciones en estos días de mi reclusión en casa por mi segunda racha de tifoidea este año, y hoy me di el tiempo no sólo de leer, también quise dejar mi estampa -como buena metiche jaja- en esta dedicatoria, gracias por recordarme con una canción tan especial que marcó una etapa de mi vida y que aveces olvido que existe ya que no está disponible en mp3 entre mis archivos debido a múltiples muertes de discos duros y complicaciones con virus...

y gfracias por citarme en el texto, eso si me chiveó n//n

alguna vez en la vida yo también platiqué con alguien sobre el soundtrack de nuestras vidas, sobre cómo se relacionan ciertos hechos con canciones, olores, sensaciones, y de hecho eso me pasa muy a menudo (últimamente ya no puedo escuchar a los Stone Temple Pilots sin acordarme de alguien especial... crap!)

espero que esté muy bien y que siga la cuenta regresiva...

saludos lejanos con lloviznas imprevistas

lokesea123 dijo...

...y bueno, no se que decir, me gusta mucho tu blog, y pues coincido en algunas cosas con vos y una de ellas es tambien el mes de cumple (yo soy del 17) y el fanatismo por interpol no se diga jeje.
te conozco poco -solo por el blog en realidad- pero veo que eres un apasionado por la musica -al igual que yo- y pues eso me motiva para darte mis sinceros saludos desde El Salvador