viernes, 6 de junio de 2008

CARL BARÂT, O CÓMO ATRAVESAR EL UMBRAL DE LOS TREINTA SIN MORIR DE SOBREDOSIS

CARL BARÂT, O CÓMO ATRAVESAR EL UMBRAL DE LOS TREINTA SIN MORIR DE SOBREDOSIS
Hoy seis de junio, Carl Ashley Raphael Barât, otrora miembro de The Libertines y actualmente líder de los Dirty Pretty Things, cumplió tres décadas de existencia sobre este planeta, por lo que aprovechado la fecha quiero dedicar este pequeño post a uno de los sujetos, que en opinión, encarna a la perfección el espíritu del rock.

Muchos han sido los críticos que han arremetido en contra de Carl Barât aduciendo un sin fin de opiniones negativas, que aunque con algo de sustento, terminan siendo por demás exageradas e inverosímiles; ciertamente Carl es un drogadicto, pero qué rockero no lo ha sido, y aunque con un talento enorme, probablemente no es el genio que el mundo del rock esperaba, pues ni es el mejor cantante ni el mejor compositor, pero nadie puede negar que revolucionó la música en un momento en que el rock británico estaba estancado en melodías cursis y pegajosas, que en nada se parecían al brit rock o brit pop de los años noventas, cuando grupos como Radiohead, Oasis, Blur, Pulp y hasta Travis ofrecían rolas con un mayor significado que las bandas que las sucedieron.

Con The Libertines (banda que muchos han considerado la respuesta inglesa a The Strokes), Carl Barât mostró una nueva forma de hacer rock retomando elementos del pasado, haciendo rolas con letras mas sencillas pero de sonidos más pesados, fuertes y caóticos, rolas para desahogarse por completo; además, The Libertines y Barât recobraron el contacto con el público al tocar en escenarios más pequeños e íntimos, que les permitieron volver sus ojos a los fans y escuchar por igual sus aplausos, sus gritos de aprobación o amor, reproches e insultos.

Carl Barât es un músico que toca con el alma, sólo hay que ver alguna presentación de los Libertines o los Dirty para percatarnos que Barât adora lo que hace, y mejor aun, logra contagiar con su ánimo a todo aquel que tiene el privilegio de verlo y escucharlo. El gran problema en la vida de Carl Barât ha sido Pete Doherty, pues a pesar de haber sido su mejor amigo, su compañero de éxitos y parrandas, en incontables ocasiones también le ha representado una gran molestia, y por qué no decirlo, quizas en determinado momento Carl ha llegado a considerarlo como un error en su carrera.

Gracias a Amy, hermana de Pete, Carl pudo conocerlo en 1996, pues dicha chica estudiaba en la misma Universidad que éste; en un inicio Carl detestó la irreverencia y petulancia de Doherty, pero con el tiempo descubrió su lado agradable y terminaron por convertirse en los mejores amigos; posteriormente, junto con John Hassall y Gary Powell formaron The Libertines, banda con la que consiguieron un gran reconocimiento a nivel mundial.
The Libertines tenían todo para permanecer en el mundo del rock por mucho tiempo, pero lamentablemente los vicios y problemas emocionales de Pete Doherty terminaron por colmar la paciencia de Carl, quien en el dos mil tres respaldado por el resto de los miembros de la banda, decidió no ser más la niñera de su amigo (para eso esta la Kate Moss) y optó por expulsarlo de la agrupación, terminando así con la historia de una excelente banda de rock.

Sin embargo, la atracción entre Barât y Doherty ha sido más fuerte que sus conflictos, pues en incontables ocasiones Carl le ha perdonado a Pete un sin numero de groserías y traiciones, lo cual demuestra su gran sentido de amistad y lealtad; pero a pesar del cariño o “atracción” que hay entre ellos (la cual simplemente no se puede negar), ambos decidieron seguir por caminos distintos, Carl Barât y el resto de los Libertines formaron los Dirty Pretty Things y Peter Doherty creo los Babyshambles, esta última, que aunque con más éxito que la de sus antiguos compañeros, no logra superar los triunfos del pasado.

El futuro de Carl Barât en el mundo de la música es incierto, pues a pesar de su indiscutible talento y de que el “Waterloo to Anywhere” (primer álbum de los Dirty Pretty Things) alcanzó buenas criticas, es difícil asegurar que Carl logré crear algo tan bueno como lo hecho con The Libertines; más sin importar lo que ocurra, Carl Barât, el inglesito de melena alborotada, mirada penetrante y actitud valemadrista, ha dejado una huella imborrable en el mundo de la música, huella que al menos yo planeo venerar por mucho tiempo.


Can’t Stand Me Now


Boys In The Band

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Carl no conocio a Pete gracias a Lucie, fue por la hermana de Pete, Amy. Y Pete no fue un error en la vida de Carl... al contrario, creo que no conoceriamos a Carl sin Pete.

Holden ArG dijo...

ZaZ, estas totalmente en lo cierto, quien en realidad los presentó fue Amy, por lo cual pido una disculpa y en su momento haré la corrección correspondiente; por otro lado, probablemente sea verdad que debido a Pete muchos conocen a Carl, pero desde mi muy personal perspectiva creo que la razón de ello deriva de situaciones inadecuadas, como son los escándalos que caracterizan a Doherty, y no porque éste sea mas talentoso que Barat; si bien Pete es un músico increíblemente bueno, lamentablemente se ha dado a conocer más por sus actos de autodestrucción que por su trabajo, por ejemplo, en México mucha gente que ni siquiera se congratula con el rock lo conocen, pero no por su participación con The Libertines o los Babyshambles, sino por su publicitado noviazgo con la Moss y sus adicción a las drogas; finalmente, aunque son amigos, no se puede negar que en varias ocasiones Pete ha sido para Carl un fuerte dolor de cabeza. Gracias por tus comentarios, y aunque diferimos en algunas ideas, creo que los dos podríamos concluir que Pete y Carl hacen mas cosas geniales juntos que separados.

P.D. Aunque me gusta la música de The Libertines, la verdad no conozco mucho de sus integrantes, razón por la que confundo algunos datos sobre su historia, por lo cual te agradecería que me brindaras más información sobre ellos o las fuentes adecuadas para obtenerla.